ORIOL FÀBREGAS CARNÉ
Tras mis estudios en Dirección Hotelera y Turismo, entré a trabajar en el sector hotelero (HOTUSA), gestionando una cartera de clientes de agencias de incoming y DMC; y tras varios años, reconduje mi carrera profesional hacia el sector de la restauración. Entré a trabajar en las oficinas centrales de un importante grupo de restauración (Grupo Tragaluz). Empecé como adjunto al departamento de compras y, pasado unos años, me promocionaron a responsable de compras, reportando directamente a Dirección General y a la Propiedad.
Quise crecer profesionalmente, y para ello necesitaba poder crear un espacio gastronómico desde cero; momento en el que decido crear BAR BUT (@barbutbcn).
BAR BUT es un proyecto personal, donde me vuelco con todos los aspectos del restaurante, su decoración, la oferta gastronómica, la negociación con proveedores, incluso la gestión de las obras de remodelación del espacio pasaron por mis manos. Destacar que en todo momento me rodeé de personas entendidas en cada sector (decoración y gastronomía) para encarrilar bien el proyecto.
Tras arrancar BAR BUT, en 2017 surgió la posibilidad de asesorar nuevos proyectos para terceras personas. Conjuntamente con la propiedad de AEROCLUB del EMPORDA, creamos el espacio ALA BRAVA (@alabrava_pals), espacio gastronómico situado en la misma arena de la playa de Pals (Girona, Costa Brava). En este proyecto desarrollé la marca/naming, logo, atrezo del espacio, definición gastronómica y creación de carta, negociación con proveedores, formación del staff y el seguimiento del negocio. Con el proyecto ALA BRAVA acercamos la gastronomía al concepto chiringuito de playa, seleccionando el producto y creando un espacio muy confortable.
Con el éxito de ALA BRAVA, al cabo de unos meses, en 2018, salió un nuevo proyecto repitiendo cliente. Esta vez fue en Cap sa Sal (Begur, Girona). Re-orientamos el restaurante del Hotel Cap sa Sal Luxury y creamos el espacio ALA SAL (@alasal_begur). En este proyecto nos centramos en la definición de la propuesta gastronómica, formación del personal, creación de la marca y logo, y el asesoramiento decorativo. Tras su puesta en marcha, concluimos la colaboración.
En 2019 cerramos un nuevo proyecto, esta vez en Sitges. El cliente nos pidió remodelar todo el local, dandolé un giró de 180º tanto a nivel estético como gastronómico. En poco tiempo apareció BAR RUSIÑOL (@bar_rusinol), concepto el cual busca ser un restaurante de toda la vida de la ciudad. Para ello tuvimos que crear el nombre, logo, diseño de cartas y creación de la oferta gastronómica, formación del personal y puesta en marcha y seguimiento del negocio.
Tras estas experiencias, y mi día a día con el restaurante BAR BUT, estoy en un momento de seguir creciendo profesionalmente y focalizarme en la gestión/creación de propuestas gastronómicas, así como asesorar en la reorientación de negocios de restauración a terceros.